El popular actor da vida a Willy Loman, un viajante de comercio que protagoniza esta adaptación del clásico de Arthur Miller dirigida por Rubén Szuchumacher. La cita, tendrá lugar los próximos 21 y 22 de octubre a las 20:30 horas.
El Organismo Autónomo de Cultura de Santa Cruz de Tenerife (OAC), presenta en el Teatro Guimerá Muerte de un viajante, adaptación del clásico de Arthur Miller realizada por el director argentino Rubén Szuchumacher. El montaje, protagonizado por el célebre actor Imanol Arias, reflexiona sobre el ser humano a través de la vida de un viajante de comercio.
La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Gladis de León, celebra “el gran privilegio de contar sobre el escenario del Guimerá con Imanol Arias, uno de los referentes interpretativos más importantes en el panorama escénico nacional”. De León, destaca la carrera del actor, que “ha demostrado en todos estos años actuando, el extraordinario talento que le caracteriza, haciendo suyo cada uno de los personajes a los que ha ido dando vida”. La edil de Cultura, ha querido recordar “la enorme calidad de la oferta escénica que presenta cada temporada el Teatro, con propuestas tan importantes como Muerte de un viajante y otros tantos títulos que siguen confirmando que Santa Cruz de Tenerife es un ciudad referente en actividad cultural”.
Muerte de un viajante se interpretará en dos sesiones los días 21 y 22 de octubre a las 20:30 horas, y para disfrutar de la cita, las entradas estarán disponibles en la taquilla del Teatro a precios que oscilan entre los 20 y los 25 euros y en www.teatroguimera.es, donde también pueden consultarse los descuentos existentes para diferentes colectivos. Además, el Teatro cuenta con el número de teléfono 922 609 450 para cualquier información.
Willy Loman es un viajante de comercio que ha entregado todo su esfuerzo y su carrera profesional a la empresa para la que trabaja. Su único objetivo es darle una vida mejor a su familia, su mujer y sus dos hijos, que le adoran y a los que quiere inculcar la ambición por triunfar y progresar en la escala social. Trabajador infatigable, ahora, con sesenta y tres años, exhausto y agotado tras una vida sin descanso, ve cómo su posición en la empresa se tambalea.
Sus ventas ya no son las que eran y su productividad cae en picado, lo que provoca que la relación con sus jefes se haga insostenible. Su matrimonio tampoco va bien, y la relación con sus hijos esconde un antiguo secreto que les llena de resentimiento y que amenaza con destrozar la estabilidad familiar. Todo ello le lleva a una espiral de depresión y autodestrucción, en la que su único apoyo es su abnegada esposa, la única que parece entenderle. A medida que se complican los acontecimientos y sus sueños se desvanecen, todo se precipita hacia un final trágico al que el vencido viajante parece inexorablemente abocado.
Muerte de un viajante es un clara crítica al sistema capitalista americano y un viaje por la paternidad y la tragedia humana, interpretada por un magistral Arias al que acompañan sobre el escenario su propio hijo, Jon Arias, Cristina de Inza, Carlos Serrano-Clark, Jorge Basanta, Fran Calvo y Virginia Flores.